En los próximos días, los escritores Cristina Loza, Viviana Rivero, Reyna Carranza, Roberto Lapid, Ana Moglia, Fernanda Pérez y Graciela Ramos presentarán sus libros y participarán de charlas en el evento literario más importante del país que se desarrolla en el predio de La Rural. En este especial, ellos reflexionan sobre sus expectativas y también sobre el buen momento que atraviesan las letras cordobesas.
La Feria Internacional del Libro de Buenos Aires es, sin dudas, el evento literario más importante que se realiza a nivel nacional. Allí se reúnen los grandes autores del país como así también muchas plumas exquisitas que llegan desde el exterior. Pero a esa gran “Meca” llegan además, y tras un largo peregrinaje, varios referentes locales vinculados a la narrativa.
De hecho, hoy a las 18.30 Cristina Loza estará presentando “Mariposas griegas” en la Sala Alfonsina Storni, mientras que mañana en el mismo horario y espacio le tocará el turno a Viviana Rivero quien hablará sobre los sentimientos que nos despiertan las novelas.
El 3 de mayo a las 16.30 en la Sala Adolfo Bioy Casares (ABC) del Pabellón Blanco los escritores Reyna Carranza, Roberto Lapid, Ana Moglia, Fernanda Pérez y Graciela Ramos (todos del sello El Emporio Ediciones), integrarán una mesa titulada “La construcción de los personajes en la novela histórica”, y así la lista se extiende a otras propuestas que llevan impreso en sello de La Docta y que reflejan el buen momento que está atravesando la actividad literaria y editorial de nuestra provincia.
La Feria del Libro de Buenos Aires es un lugar de privilegio para los escritores, y es por eso que Viviana Rivero no duda en afirmar: “Me gusta la Feria por lo que significa: un lugar donde los libros son la estrella y también un espacio para poder hablar de lo que se hace en Córdoba en lo literario, de los buenos escritores que tenemos acá. Aprovecho mis charlas para ponerme la camiseta de nuestra Provincia y que otros conozcan cuanto tenemos para dar”, por su parte Fernanda Pérez agrega: “Para mí representa algo muy especial. Desde hace más de 15 año siempre he seguido de cerca la Feria desde mi rol de periodista y de pronto verme integrando la programación -gracias a mi novela ‘Las Maldecidas’- es algo emocionante. Por otra parte, es también una gran responsabilidad, creo que uno tiene que llegar de la mano de un buen libro: sólido, consistente… A mí me fascina tanto la idea de participar en calidad de expositora como el hecho de ser una simple visitante”.
Las expectativas para Roberto Lapid no son menores, cuando manifiesta: “Estar en la Feria de Buenos Aires es ante todo una emoción enorme, por el reconocimiento que esto implica, por ser nuevo en el arte de escribir, por ser un escritor del interior, por la proyección que ofrece hacia el país y el mundo y por el nivel académico de los participantes”.
“Significa entender y aceptar que es posible hacer realidad un sueño, que nada es imposible si uno acompaña a sus sueños sin dejar de tener los pies sobre la tierra.
Llegar a la feria es un gran honor y también un desafío”, asegura Ana Moglia, y a ella se suma la voz de Graciela Ramos, quien evoca: “Cada año me gusta recorrerla y sentir la magia, el perfume de los libros, el encuentro con mis escritores favoritos, el placer de tener entre mis manos los libros firmados… Hoy agradezco poder estar allí con mis propios libros, es todo un desembarco desde el interior compartir con lectores de otras provincias. Poder disfrutar de ser escritora y lectora al mismo tiempo”.
Cristina Loza, quien esta tarde presentará su nueva novela, expresa: “Ésta es mi segunda vez en La Feria y es una experiencia muy interesante. Lo multitudinario, esa cantidad de personas tocando los libros, buscando la sala de la conferencia que le interesa escuchar, el bullicio alrededor del papel y la tinta, es entrañable. Encontrarme cara a cara con los lectores, esos que te escriben, que te siguen por las redes sociales, es muy grato. Y comprometido. Allí uno debe responder, es decir, hacerse responsable de lo que ha escrito. Además, es una hermosa oportunidad de compartir con mis editores, algo que por la distancia, no siempre es posible”.
Voces mediterráneas
Córdoba cuenta con un acervo literario que data de siglos. Desde los versos de Luis de Tejeda a esta parte, muchos han sido los que han puesto en un lugar relevante a las letras de nuestra Provincia.
Premios, buenas críticas y sobre todo el reconocimiento de los lectores han consolidado un proceso que hoy es observado con curiosidad por los grandes sellos editoriales.
En relación a eso, los autores recalcaron:
• Roberto Lapid (Dizna. Mensaje desde el pasado”): “Creo que no es casualidad que desde Córdoba, ‘La Docta’, se haya gestado este crecimiento literario. Hay buen material, lectores fieles que no quieren ser subestimados, y -lo que he leído de nuestros autores- es excelente. También las editoriales han crecido paralelamente en cantidad y calidad y nos permiten llegar a lugares hasta hace poco impensados.
•Cristina Loza (Autora de varias novelas, la última “Mariposas griegas”): “Córdoba se destacó siempre por la calidad de sus poetas y de sus narradores, ha tenido y tiene esa manera de resistir con las palabras, con grandes oradores y destacados novelistas. De cada punto cardinal surgen nombres, Marcos Aguinis, Juan Filloy, Leopoldo Lugones, Arturo Capdevila, Glauce Baldovin, Azor Grimaut, y tantos otros.
Es histórico el hecho de las dificultades para llegar a nivel nacional con la obra, pero creo que cada uno tiene un camino personal, una sucesión de hechos, que a la postre, terminan con un resultado feliz. En mi caso particular, el haber salido finalista del premio Planeta fue fundamental, pero el hecho de haber publicado en Córdoba, paradójicamente me favoreció. Cuando el volumen en las ventas fue muy visible, captó la atención del editor de Capital. Aún así, hay que sostener ese resultado, con una producción que amerite. Editar en Buenos Aires permite una multiplicación de lectores, y las traducciones al extranjero, y un sinnúmero de ventajas, como vivir de lo que se hace. Hoy, al haber editores locales que llevan a sus autores tratando de proyectarlos a nivel nacional, esto se ha hecho posible. Aunque, opinión muy personal, yo creo en la prepotencia del trabajo, del esfuerzo, de creer en lo que uno hace…Lo que se destaca es el número de mujeres que escriben. Cristina Bajo, pionera de la novela histórica, enriqueció y mostró a nuestra provincia con sus descripciones tan vívidas. María Teresa Andruetto y Perla Suez, con un perfil bajo, sin hacer mucho ruido, premiadas, traducidas y festejadas aquí y en el exterior.
Y como ellas, un nutrido grupo que escribe, que intenta, que sueña. Porque, en definitiva, todo tiene que ver con la calidad y con la pasión. Sin pasión no hay sueño cumplido”.
• Viviana Rivero (autora de varios títulos, su última creación “Lo que no se dice”): “Me parece que es lo que tenía que pasar, porque en donde se consume literatura, se crea literatura, nacen libros, escritores y editoriales. Recodemos que Córdoba es una de las plazas más importantes de consumidores de libros. La literatura es nuestra impronta y herencia.
•Graciela Ramos (“Malón de amor y muerte”): “Creo que hay muy buenos escritores en todas las provincias, mi opinión es que las cordobesas nos animamos más… Pero mirando un poquito para atrás la historia nos regala el recuerdo de ser una provincia de vanguardia desde sus comienzos, eso nos da el privilegio de seguir abriendo caminos y en lo personal también creo que tenemos en Córdoba buenas editoriales y un mercado sumamente lector que alimenta nuestras ganas de escribir”.
• Ana Emilia Moglia (“Al otro lado del océano”): “Creo que es la amalgama perfecta entre talento personal, esfuerzo y capacidad emprendedora. Cuando hay escritores que sueñan con ver su libro hecho realidad y, editoriales que acompañan al escritor en ese camino, el resultado no puede ser otro que el llegar muy lejos”.
• Fernanda Pérez (“Las Maldecidas”): “Córdoba tiene una tradición extensa vinculada a la formación, al conocimiento, a las letras… En las últimas décadas muchos de nuestros autores entraron al mercado literario por la puerta grande y nos han dejado esa puerta abierta para los que estamos comenzando. Nuestra obligación, como escritores, es honrar ese legado, trabajando con profesionalismo, seriedad y entrega”.
Fuente: La Mañana de Córdoba